lunes, 17 de octubre de 2016

PRESENTACIÓN DE LA GUÍA DE BUENAS PRÁCTICAS PARA PARROQUIAS

El pasado viernes 14 de octubre se presentó el libro: "Siguiendo la Laudato si’: Sugerencias para la conversión ecológica de las parroquias católicas", preparado en el marco de la actividad de la cátedra. En el acto intervinieron el párroco D. José Aurelio Martín Jiménez (Iglesia parroquial de la Concepción de Nuestra Señora), Dña. María Ángeles Martín (Universidad Rey Juan Carlos), D. Juan de Dios Larrú (Universidad Eclesiástica San Dámaso) y  D. Emilio Chuvieco director de la cátedra de ética ambiental.

Se trata de una aportación a la tarea de conversión ecológica que nos proponía el papa Francisco en su encíclica Laudato si', publicada el pasado año. Para el Papa, "La cultura ecológica no se puede reducir a una serie de respuestas urgentes y parciales a los problemas que van apareciendo en torno a la degradación del ambiente, al agotamiento de las reservas naturales y a la contaminación. Debería ser una mirada distinta, un pensamiento, una política, un programa educativo, un estilo de vida y una espiritualidad que conformen una resistencia ante el avance del paradigma tecnocrático” (n. 111).

Hay muchos ámbitos donde puede ponerse en práctica esa mirada distinta, pero para los católicos uno muy singular es el de las parroquias, donde la mayor parte de los católicos se reúnen y reciben los sacramentos y la instrucción religiosa.

El texto presentado el pasado viernes pretende sugerir ideas para concretar esa nueva toma de conciencia sobre los problemas ambientales, enmarcándolos en un redescubrimiento de la Teología de la Creación, tan propia del cristianismo. Presenta el marco teológico de la conversión ecológica, algunas sugerencias sobre actividades parroquiales que pueden ayudar a redescubrir el valor espiritual de la naturaleza, y una guía de buenas prácticas ambientales, que puede ayudar a los párrocos a buscar una mayor excelencia ambiental en la gestión del edificio o de sus actividades.

En este trabajo se comentan algunas medidas de eficiencia energética, que pueden facilitar una generación o uso más ambiental de la energía, en la iluminación o la climatización de los templos. Se revisan otras medidas en la gestión del agua, de los consumibles, los materiales de construcción, los jardines o el tratamiento de los residuos. Así mismo, se anima a las comunidades parroquiales a que se proponen metas concretas que ayuden al ahorro energético, al mayor uso de las energías renovables o de productos con certificación ecológica. Las parroquias son signos visibles del espíritu cristiano, y deberían ser pioneras en una consideración más local de los problemas ambientales, que pueden contribuir a aliviar, además de reforzar las motivaciones morales que nos permitan relacionarnos más amablemente con la naturaleza. Como indica la encíclica:

“Todas las comunidades cristianas tienen un rol importante que cumplir en esta educación. Espero también que en nuestros seminarios y casas religiosas de formación se eduque para una austeridad responsable, para la contemplación agradecida del mundo, para el cuidado de la fragilidad de los pobres y del ambiente” (Laudato si, n. 214).

Noticias en prensa:

http://www.religionconfidencial.com/catolicos/Editan-medioambientales-conversion-ecologica-parroquias_0_2801719819.html